REFLEXIONES LIBERTARIAS
¿OTRA VEZ EL IQ?
Ricardo Valenzuela
Durante gran parte de mi vida profesional, como
los conquistadores españoles en busca la mítica ciudad de El Dorado, he buscado
la ruta que las naciones transitan para arribar a su riqueza, o, a la
vergonzosa pobreza que las abate. Esos caminos me ha llevado a tocar sensibles
cuerdas de nuestro tejido social por lo que, tradicionalmente, mis exposiciones
han provocado desde la emergencia de genuino interés, hasta sectores ofendidos
que me etiquetan con múltiples calificativos y de gran retórica.
Navegando por esos mares, hace meses
publiqué un escrito titulado Aztecas VS Griegos en el cual me daba a exponer el
problema productor de una maquinara de lujo que se mantiene con el freno de
mano activado, y no permite su avance: Seres humanos propietarios de
coeficientes intelectuales muy superiores a los normal a quienes, lejos de
ayudarlos para desarrollar su bendición, no solamente los desaprovechamos, los
llegamos a empujar hasta convertirlos en verdaderos problemas sociales.
La publicación provocaba una ola de
indignación entre grupos que, al analizar el contenido de forma superficial, se
sintieran ofendidos. Ello promovió me sumergiera más profundamente en el tema
siguiendo la pista del inspirador de mi escrito, quien años antes cimbraba al
mundo con su libro, The Bell Curve. Mi nueva aventura me ha conducido a fuentes
verdaderamente controversiales que considero no deben de ignorarse. Me transportó
al descubrimiento de una actitud social interesante y sumamente delicada,
inclusive para exponerla.
Los Profesores universitarios, Richard Lynn
y Tatu Vanhanen, son autores de un libro argumentando las diferencias en los
ingresos nacionales de los países, tienen una relación directa con los
diferentes promedios nacionales de coeficientes intelectuales de sus habitantes
por lo que, ellos consideran este factor como ingrediente neurálgico que
produce La Riqueza o pobreza de las naciones. Afirman también, de manera
controversial, la diferencia en los niveles de tales coeficientes se debe a dos
tipos de factores; genéticos y ambientales y pasan luego a exponer lo más preocupante:
Niveles bajos de crecimiento económico provocan bajos niveles intelectuales y
viceversa.
En lo que considero parte medular de la
obra, los autores esgrimen un concepto que han bautizado como Feedback positivo
o negativo. Si una nación responde (por falta de raciocinio) ante una
perturbación hacia la misma dirección que la provoca, produce un resultado
ampliado y explosivo. Es decir, una pequeña perturbación llega a producir
grandes cambios pero hacia la misma dirección alejando aun más al país de su
punto original. EJ. El rico se hace cada vez más rico y el pobre mas pobre. Se
procede luego a responder apuntando hacia la misma dirección y, magia, la
perturbación crece y se presentan fenómenos como los Hugos Chávez y CIA.
Este campo que incluye a la ciencia, moral,
economía, antropología etc, ha sido irresponsablemente ignorado por el gran
temor a la corrección política que cubre al mundo cuando, ante afirmaciones
fuera de la pauta establecida, de inmediato, con pasión incontrolable, se
esgrime el factor racismo. Es por ello que, como el elefante en la sala de casa
del alcohólico, el mundo finge no verlo cuando se prepara para invadir el resto
de las habitaciones.
Afirmaciones de los autores:
La inteligencia de las naciones
occidentales decrece debido a factores de paradoja económico—demográfica. La
humanidad se desarrolló a base de competencia y lucha por satisfactores lo que
no permitía invertir tiempo en la formación adecuada de los hijos. Anterior a
1850, al viejo estilo darwiniano, se produjo una agresiva selección produciendo
las clases favorecidas (¿Meritocracia?). La mortalidad infantil era superior
entre las clases bajas puesto que los favorecidos contaban con más recursos
para salvar y educar a sus hijos. Y he aquí lo más explosivo de las
afirmaciones: Ese proceso “natural del mercado,” desplazando el feudalismo monárquico,
provocó una selección a favor de portadores con características superiores.
Continúan afirmando: Los últimos 150 años,
los menos favorecidos se dedicaron a procrear hijos masivamente sin poder
invertir en ellos provocando un fenómeno que científicos bautizaron como;
Dzsgenics. En el describen la debilitadota evolución de ciertas poblaciones del
mundo asentando las desigualdades. En matemáticas, desigualdad es afirmación
acerca del tamaño y orden de dos objetos y solamente son iguales si su
constitución es la misma en todos sentidos. Y ante un dilema de esa naturaleza,
científica, social y políticamente es imposible igualarlos como se equivocaran
los revolucionarios franceses.
En 1960, William Shockley, premio Nobel de
Física, usaba el término para argumentar el futuro de la población apuntaba
hacia una ruta peligrosa puesto que la población con IQ más limitados, estaban
produciendo el doble de hijos que aquellos con coeficientes superiores. De
inmediato se le acusó de racista, nazi, anticristo segregándolo del mundo
científico para condenarlo al ostracismo.
Pero Shockley lejos de silenciarse continuó
apuntando otros factores. Las guerras, asentaba el premio Nobel, han provocado
la pérdida de hombres con las mejores características. Además, las
revoluciones, iniciando con la francesa, han tenido el efecto Dysegnetico
cuando los seres con más altos coeficientes fueran sacrificados por aquellos
portadores de los más bajos. Salta luego uno de los modernos discípulos del
Prof. Shockley para informar un estudio de fertilidad hecho entre 2,600 mujeres
en EU, muestra las de IQ más elevados tienen menos hijos y ello ha provocado
una caída de 2 puntos en el IQ nacional.
Shockley afirmaba es imposible evitar los
dotados progresen mucho mas que los no dotados. Sin embargo, con fuerza
insistía era responsabilidad moral de los dotados dar ayuda a sus semejantes
sin crear dependencia.
Conciente de ser este tema sumamente
controversial, he querido ponerlo sobre la mesa para su consideración sin
establecer posiciones puesto que, hasta hoy, realmente no las tengo. Sin embargo,
insisto es un tema no sólo importante, sino en gran parte del mundo ignorado.
Una gran preocupación mundial hoy día, son los programas que China ha
implementado con el objetivo de evitar el nacimiento de seres de calidad
inferior llegado a la aprobación de su Ley de Eugenics y Protección de la Salud
Nacional, que alguien compara con las ideas Hitlerianas de raza superior.
Como tarea para mis dos lectores informo de
“algunas calificaciones” del IQ mundial de parte de los controversiales
autores:
IQ Ingreso per capita
Hong Kong (107) $36,000
Corea del Sur (106) $27,000
Japón (105) $33,000
Taiwán (104) $31,000
Singapur (103) $30,000
Alemania (102) $33,000
Inglaterra (101) $31,000
EU (101) $45,000
México (87) $9,000
Irlanda $43,000